Uy que no tiene oido fino ni nada, aqui el Duke, en cuanto Carlos (mi marido) gira la esquina de arriba de la calle con el coche, ya esta de los nervios, jejejeje, como me alegra que el kong funcione, yo hoy por hoy confio ciegamente en el , me lo ha demostrado y con creces, y me alegra un monton escuchar que tienes unos vecinos tan comprensivos y que la perrina se va adaptando, jejeje lo de la bolita, en fin, dejemoslo en cosas que pasan, jajajaja