Como dice el dicho, despés de la tormenta viene la calma, pero vaya con la tormenta!.
Nosotros nos quedamos el más negrito, que por cierto es la niña ( no os preocupeis al padre lo vamos a capar en breve, que no tenemos ganas de más sustos).Leire ya le ha puesto nombre y se llama Laila. Ahora están muy juguetones y ayer empezaron a comer unas cuantas croquetitas de gatito je je , parece que esten comiendo un caramelo gigante. Están empezando a corretear por la habitación y no paran quietos y su mami que es una santa va loquita con ellos.
El que está un poco tonto es el padre, ahora tengo que ir con cuidado por que les "bufa" a los peques, supongo que serán los celos, la Luna ya no está tanto con él y eso lo mosquea, que se le va hacer.
Weno hasta la próxima padrinos, tios y tias de los mininos.