Me alegro muchísimo de que se quede Bilbo

, pero no creo que te hayamos juzgado mal. Hoy en día es común abandonar a un perro (por desgracia) por la poca paciencia que se tiene con él, y a mi se me caía el alma de pensar que el pobre Bilbo tendría que dejar a su familia. Entiendo a tu padre, el mío al principio se ponía nervioso con Pelayo pero cuando ves los progresos, te sientes tan orgulloso que olvidas sus mordicos y sus cacas.
Sé dura con él y enséñale disciplina, es la única manera de educarlo

. Ah! y dile a tu padre que jamás se arrepentirá de haberlo comprado