El collar eléctrico es muy popular, tanto por su buena imagen como por la mala.
Yo no comparto varias de tus ideas, por ejemplo, jamás utilizaría un collar para "Enseñar", ya que el adiestramiento para mi, solo ha de basarse en un estimulo positivo.
Los estímulos negativos no enseñan, sino que fuerzan al perro a una conducta, que lo mas probable acabe odiando en vez de realizarla con ánimo e ilusión, que es en lo que se vasa el estimulo positivo. Si el perro recibe premios por hacerlo bien, la próxima vez lo INTENTARA hacer mejor y mas rápido.
Los estímulos negativos no solo puede conseguir que el perro odie cierto ejercicio, si no que empiece a no sentir ganas de aprender nada y se cierre a las futuras enseñanzas.
Un perro alegre es un perro con la mente abierta, receptivo y mucho mas pendiente del lenguaje corporal de su amo.
Los estímulos negativos, son naturales, mucho mas que los positivos. Me explico, una manada de perros salvajes, se comunican por estímulos negativos, si lo haces mal te pego y si lo haces bien te dejo en paz. Copiando ese comportamiento, para mí el único objetivo que tiene un collar eléctrico es eliminar las malas conductas del perro. (Saltar en cima de la gente, gruñir, pelear, comer caca o cosas del suelo, morder, etc…)
El problema del collar, es que es muy “cómodo” usarlo, y enseñarle el “VEN AQUÍ” es muy sencillo con este artilugio, pero MANEJAR el collar es realmente complicado, hasta tal punto que la mayoría de la gente modifica el carácter natural del propio perro.
Si no sabes usar muy muy muy bien el collar, es mejor no intentarlo, ya que no enseñaras rutinas al perro sino que su carácter cambiara para adaptarse a su nueva situación. Y esto es muy peligroso, porque de un perro amable, cariñoso y desobediente puedes quedarte con un perro obediente pero apático e incluso agresivo.